Reforma integral de una vivienda en calle Margenat 

Para una pareja con una hija pequeña

Necesidad

Oriol heredó este piso en la antigua casa de sus abuelos, cerca de la Bonanova en Barcelona, y enseguida tuvo claro que era una oportunidad para establecerse aquí con su pareja y su hija, aunque el mal estado de conservación de la vivienda y su distribución compartimentada, requerían grandes cambios para poder adaptarse a su actual estilo de vida.

Reto del proyecto

La casa contaba con muros de fachada sin cámara, con carpinterías antiguas y precarias y una distribución muy compartimentada con paredes maestras. Además, Oriol quería que su casa resultara verdaderamente confortable, muy eficiente, energéticamente y práctica para el día a día familiar.

Solución

Por todo ello, se realizaron diferentes apeos estructurales que permitieron comunicar los espacios facilitando el paso de luz natural, se trasdosearon y aislaron los muros de fachada, se renovaron las instalaciones y se cambió la carpintería exterior. Además, se construyó una terraza, un nuevo baño y, en la cocina, se tuvo especial cuidado en situar el motor de la campana extractora de humos fuera de la vivienda para evitar el ruido durante su funcionamiento.

Nos aseguramos de que la cocina fuera muy funcional y espaciosa sin quitarle amplitud al salón que, a su vez, cuenta con un gran armario de almacenaje con puertas sin tirador del mismo color que las paredes para que no resultara pesado visualmente. De esta manera, las necesidades de almacenaje quedaron resueltas, facilitando el orden en la zona de día sin apenas comprometer el espacio útil disponible.

La terraza orientada al jardín se dimensionó para dar cabida a una pequeña mesa con sillas sin afectar la visibilidad de la vivienda superior y finalmente se dispusieron la iluminación y el mobiliario, combinando elementos nuevos con otros que ya tenían.